Abre los ojos princesa (Hijos del dragón)

Abre los ojos, princesa (Nad y Lizard Fic - Hijos del dragón)


Nadine.... ¿Dónde estás, Nad? ¿Dónde estás?
No sé qué camino elegir, son demasiados, y solo uno de ellos me llevará a ti. Mi vida, ayúdame, necesito verte de nuevo, esta eterna búsqueda me consume.
Tocar tus labios, abrazarte... Es mi única necesidad, saber que me has perdonado por todo lo que he hecho, por ocultarte día tras día que te quiero, que te amo incluso más que amo mi vida.
Nadine, ¿me oyes? Por favor, despierta, escúchame... Si tú mueres, yo muero contigo, no permitiré que me dejes, pero por favor, lucha. Lucha por ti, lucha por el bebé.
Un bebé. Voy a ser padre. Qué increíble, ¿cierto? Yo... El mujeriego del mundo, el que siempre andaba buscando faldas en donde esconderse, padre de una criatura cuya madre es la más bella princesa que jamás he conocido.
No puedes dejarme, no puedes.
Mi vida, oye, ¿ves? Es la tierra, es el mar, el aire y el fuego los que gritan. Es la luz, ha derrotado a la oscuridad, la ha vencido, por verte sonreír.
Me cambiaría por ti ahora mismo, pero no sé cómo hacerlo. Doy mi insignificante vida, mi respiración, mi corazón, solo por ver tus ojos, solo por poder acariciar tus labios con los míos, saborear tu boca noche tras noche y despertarme cada mañana contigo, soñar con caer del cielo y encontrarme con un ángel en el mundo infeliz. Sí, mi pequeña, era un mundo infeliz, un caos hasta que te conocí.
Hasta que supe lo que de verdad es amar con el corazón y no con la cabeza.
Nadine, te agarro la mano, esperanzado en ver esos párpados levantados. Acaricio tu suave y sedosa melena. Cómo me gustaría perderme allí.
Nad, mi princesa, mi bella princesa, la única mujer capaz de atraer a este estúpido lizman hasta la trampa del cariño.
Quiero abrir los ojos todos los días y saber que estás aquí a mi lado.
Quiero respirar tu mismo aire.
Quiero quemarme con el mismo fuego que arde en nuestro corazón.
Quiero escalar las más altas cumbres y dejar caer la bandera de mi amor.
Quiero surcar los cielos, sabiendo que en cualquier momento recogeré de la nube un ángel. Tú.
No destroces mis sueños, mis deseos... Abre los ojos, mi niña, ábrelos.
Si tú no sigues, yo me cansaré.
Si tú no vives, yo moriré.
Si tú no sonríes, yo me marchitaré.
Si tú no estás a mi lado, no quiero ni a la más bella criatura.
Si tú no me abrazas, no quiero más besos.
Nadine, te quiero, despierta...